Salimos sobre las diez y media de la mañana, y en la semirígida nos acompañaba un grupo de nueve personas, dispuestas a satisfacer su curiosidad y quizas tener ocasión de plasmar esos momentos, como así fué.
Después de estar bordeando el viento en dirección hacia Mogán, y una vez que navegamos unas pocas millas, ya pudimos ver algo de acción inminente. Desgraciadamente para mí , un pequeño problema de humedad en uno de los conectores de la cámara, quizás por descuido de protección, provocó que no pudiera tomar imágenes bajo el agua, con lo que me dediqué a capturar los que ocurriera alrededor. No tardamos en llegar a un grupo de pardelas en las que se apreciaba notoriamente un amplio grupo de delfines comiéndo.
Lo mejor vino luego cuando prácticamente todo el grupo pudo nadar con los delfines en breve ocasiones y disfrutar desde el agua de esos maravillos mamíferos... Esperemos que los problemas surgidos se arreglen en breve y vuelva a intentar la captura submarina. No hubo esta vez encuentro con ballena, pero lo más impresionante fué , sin duda, la mancha de caballas que era objeto de acoso continuo por parte de los delfines. Hubo dos tipos que claramente pudimos diferenciar , el mular y el moteado(nombres vulgares).